No es la primera vez que aquí hablamos sobre los vehículos de movilidad personal (VMP), en concreto de los patinetes eléctricos, que inundan calles y aceras de ciudades y pueblos de medio mundo. Cierto, hemos tratado largo y tendido sobre la siniestralidad que registran los accidentes en los que se ven involucrados este tipo de vehículos, concretamente, entre otras cuestiones, del interés que ha despertado esta nueva forma de movilidad, tanto por parte de sus conductores como de la población en general. Sin embargo, nos faltaba entrar con un poco más de detalle en la otra cara de la moneda: los seguros que los cubren.
Pues bien, ya somos muchos los que abogamos por la implantación de un seguro obligatorio para los vehículos de movilidad personal, con potentes argumentos que a medida que pasa el tiempo se fortalecen aún más si se tiene en cuenta que la cifra de accidentes en los que se ven involucrados los VMP es cada vez más abultada. En nuestra ciudad, en concreto, estas voces no están solas y no son pocos los políticos y los gerentes públicos que se suman a la demanda, como por ejemplo Albert Batlle, concejal de Seguridad del Ayuntamiento de Barcelona, la DGT y el director del Servicio Catalán del Tráfico de la Generalitat de Catalunya, Juli Gendrau.
La ley no obliga a ningún ayuntamiento a imponer un seguro obligatorio a los conductores de VMP; es el propio consistorio quien debe regular en este sentido, pues es quien tiene la potestad para hacerlo. Pues bien, en una ciudad como Barcelona, en la que el parque de vehículos es tan grande, donde circulan cada día enormes cantidades de peatones y vehículos de todo tipo, nos parece de recibo que cualquier medio de transporte, sea del tipo que sea, deba contratar obligatoriamente un seguro, con el fin de que tanto los terceros como el propio titular del seguro queden protegidos. Y esto no es así en nuestra ciudad.
No son pocas las compañías de seguros que, en previsión de que tarde o temprano llegará una ley reguladora, han sacado al mercado seguros adaptados a los patinetes eléctricos. Desde unos 40 euros al año en su versión más básica, estos nuevos seguros suelen incluir defensa jurídica, responsabilidad civil y daños derivados de los accidentes. Como los VMP, estos productos también se han adaptado a los tiempos que corren y suelen gestionarse a través de aplicaciones móviles. Y parece que su éxito va en aumento. Al menos así lo aseguran desde una de las compañías de seguros líderes del mercado, que confirma que desde finales del año 2018 la contratación de este novedoso producto ha crecido un 162 por ciento.