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Muertes por Covid en un geriátrico

Por 15 octubre, 2024No Comments
Daniel Vosseler, en el programa de TV-3 'tot es mou' habla de las muertes por covid en un geriátrico.

Daniel Vosseler explica en ‘Tot es mou’ (TV-3) el dramático caso de las siete personas muertas por Covid en un geriátrico de Olot

Daniel Vosseler intervino el lunes, 7 de octubre, en el programa de TV-3 ‘Tot es mou’ para explicar el caso de las muertes por Covid en un geriátrico de Olot. Una trabajadora de la residencia acudió a este centro sabiendo que estaba con sintomatología.

Tras la denuncia de Vosseler Abogados de las muertes por Covid en un geriátrico, el Juzgado de Instrucción de Olot ha pedido a los Mossos que identifiquen a los familiares de las 7 personas que fallecieron por Covid en el geriátrico Torreblanca.

Daniel Vosseler representa a la familia de una de las víctimas (familiar del periodista Joan Guirado). El letrado considera que este caso es un «presunto homicidio múltiple por imprudencia grave».

LA ACCIÓN DE LA JUSTICIA

La Jueza de Instrucción de Olot (Girona) ha requerido a los Mossos d’Escuadra para que identifiquen a las siete personas fallecidas en agosto de 2021 por un brote de Covid. Brote supuestamente provocado por una empleada de la residencia geriátrica Torreblanca, en la que estaban internadas las víctimas. La magistrada también ha requerido a los familiares de los fallecidos para que puedan personarse en esta causa.

Tal y como consta en las diligencias previas, una empleada del centro fue a trabajar al geriátrico Torreblanca, pese a reconocer a compañeros y dirección que tenía síntomas compatibles con la Covid.

En su escrito, la jueza pide que se “identifiquen las personas que fallecieron como consecuencia del brote en cuestión y las fechas”. Y que se faciliten al Juzgado de Instrucción número 1 de Olot “los datos de las personas de contacto de los residentes finados (familiares). Todo ello a efectos de que puedan ser llamadas al proceso en pro del derecho que les asiste como víctimas perjudicadas por el delito que se está investigando”.

El 25 de agosto del 2021, Vosseler Abogados presentó una denuncia en nombre de los familiares de Luciana Moreno Maillo, que murió en el centro a causa de la Covid. Pero en estas mismas fechas murieron siete personas residentes en el mismo geriátrico por el brote de Covid que provocó la empleada. Y ahora se requiere la identificación de estas personas.

Vosseler Abogados lamenta que «la falta de medios y personal de la Justicia» haya provocado que todo el proceso de las muertes por Covid en un geriátrico arrastre un «injustificable retraso de casi tres años». Y pone como ejemplo la declaración de los investigados: «se fijó para el pasado mes de junio, y se ha aplazado hasta el próximo 30 de enero de 2025».

Así, el jueves, 30 de enero de 2025, está previsto que declaren ante la jueza a los responsables del geriátrico, R.R.I. y L.J.C. También lo harán la investigada, A.I.Z.A., y una compañera de trabajo de la investigada, A.V.T.

LOS HECHOS

A principios de agosto de 2021 se detectó un brote de Covid en el geriátrico Torreblanca, que provocó la muerte de siete residentes del centro. Entre ellos, Luciana Moreno Maillo, que  falleció el 21 de agosto del 2021.

El presunto origen de este brote pudo estar en una trabajadora del centro, A.I.Z.A., que había reconocido ante los responsables del geriátrico, y también en conversación con una compañera de trabajo, que los días 30 y 31 de julio estaba indispuesta y con síntomas. Sin embargo, fue a trabajar «para no perjudicar al servicio». No fue hasta el 4 de agosto cuando, confirmado el diagnóstico de Covid, cogió la baja por enfermedad.

El hecho de que A.I.Z.A. diese positivo en el test que se realizó en la residencia llevó a los responsables del geriátrico a despedirla. Fue mediante burofax del 25 de agosto, y por negligencia en su actuación. La dirección del centro también reconoció que la mayoría de los positivos de Covid que hubo en estas fechas en el geriátrico (15 residentes y siete trabajadores) fueron en la planta donde estaba asignada la trabajadora despedida.

Para los responsables del centro, nunca debería haber ido a trabajar con su sintomatología, compatible con Covid. Y que debería haber comunicado a la dirección estos hechos.

Autor Vosseler Abogados

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